Es una técnología utilizada por clínicas de belleza y medicina estética para reducir los signos de envejecimiento facial, mediante la inyección de sustancias que disminuyen las líneas de expresión y arrugas en la cara.
La toxina botulínica se extrae de un microorganismo llamado Clostridium Botulinum, que al ser inyectado relaja los músculos bloqueando temporalmente el efecto de una sustancia llamada Acetilcolina, quién es la encargada de la contracción muscular, este efecto es temporal y permanece en el músculo aproximdamente 6 meses, dependiendo del grosor y la fuerza de contracción del músculo.